viernes, diciembre 27, 2013

Supongo que de eso se trata el amor

Y sin decir "agua va", el cabrón que estaba a mi lado en la barra de las tortas callejeras le suelta a su chava la pregunta de si se quiere casar con él.
La chava se pasa apurada el tremendo bocado de torta de salchicha que acababa de atacar y le responde que sí.
Los presentes aplaudimos, brindamos con cocacola y estrechamos nuestras grasientas manos... 
...Y entonces fuimos testigos de un largo y apasionado beso de lengüita, donde además de saliva con mayonesa se intercambiaban o caían trocitos de salchicha, tocino, huevo y queso de puerco.

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